La Aventura que nos llevó a Tu Código Digital

Todo arrancó en un café de barrio, donde un grupo de amigos gamer compartía anécdotas y cafés fríos. Entre risas surgió la frustración: conseguir gift cards y licencias era tan engorroso como pelear contra un jefe final. Ahí nació la idea de simplificarlo todo.

Con pantallas, pizarras y un equipo mezcla de diseñadores, desarrolladores y atención al cliente, soñamos un lugar en el que, con un solo clic, tu código digital llegara al instante. Desde memes que celebran tu compra hasta protocolos serios de seguridad, queríamos que el proceso fuera tan rápido como tu próxima partida.

Las pruebas iniciales fueron tan satisfactorias como descubrir un loot legendario: primeros emails con códigos sin error, pagos seguros y clientes felices que recibían su producto al instante. Así nació Tu Código Digital: no solo una tienda, sino la promesa de que tu juego empiece sin demoras… y esto recién empieza.

Algunas preguntas de gamers, respondidas aquí.

Acá resolvemos las dudas más comunes para que nada te saque de la partida.

 

¿Cómo recibo mi código digital?

Recibirás tu licencia o gift card al instante en tu correo, sin esperas ni complicaciones.

¿Qué métodos de pago están disponibles?

Aceptamos tarjeta de crédito/débito, MercadoPago, transferencia bancaria y criptomonedas.

¿Qué hago si no me llegó mi pedido?

Primero revisá tu carpeta de spam. Si todavía no aparece, escribinos y te lo reenviamos al toque.

¿Puedo cambiar o solicitar reembolso de un producto?

Una vez enviado el código, no se aceptan cambios ni devoluciones, salvo si el código no funciona. En ese caso, contactanos y te lo reemplazamos al instante.

 
 

De un café gamer a tu código al instante

Todo empezó una tarde en aquel café de barrio, con un grupo de amigos compartiendo café y anécdotas de partidas épicas. Mientras uno presumía su última victoria en línea, otro suspiraba porque su gift card nunca llegaba: “¡La perdí entre correos y contraseñas, y al final me demoro más que un boss final!”, bromeaba. Ahí nos dimos cuenta de algo: el mundo gamer avanzaba a la velocidad de la luz, pero la forma de conseguir licencias y tarjetas seguía siendo un viaje de obstáculos.

Entre risas y cafés fríos, empezó a germinar la idea de un lugar donde todo fuera tan fácil como pulsar “comprar”. Soñamos con una plataforma que no te hiciera buscar números interminables, ni esperar horas por un email, ni temer que la caja física se pierda en tránsito. Quisimos un espacio donde tu código digital llegara al instante, sin drama, sin “¿dónde está mi pedido?” y, sobre todo, sin interrupciones cuando estás entrando al combate final.

Nos encerramos a brainstormear frente a pantallas y pizarras blancas llenas de ideas absurdas (¿qué tal un bot que celebre tu compra con memes?) y estrategias serias (¡seguridad ante todo!). Armamos un equipo que combina pasión gamer con conocimientos tech: diseñadores gráficos que aman los píxeles, desarrolladores que hablan en código y atención al cliente que entiende que tu tiempo es oro —o, mejor dicho, créditos virtuales.

Las primeras pruebas fueron casi tan emocionantes como un loot raro: el primer email con un código de juego que salió sin fallos, el primer pago seguro que no rebotó, el primer “¡Gracias, lo recibí al instante!” de un cliente satisfecho. Fue ahí cuando supimos que estábamos construyendo algo distinto: no solo un sitio de ventas, sino una promesa de que tu próxima partida arrancará sin demoras.

De esas charlas en el café y de noches de código nació Tu Código Digital, el lugar donde el entretenimiento llega directo a tu inbox. Aquí no medimos trayectoria en años acumulados, sino en cada partida que arranca justo al hacer clic. Y esto recién comienza: porque para nosotros, cada gamer merece una experiencia sin interrupciones… ¡y nosotros estamos aquí para asegurarnos de que así sea!